Foto: La cuchara azul
¡Qué ricos son los helados caseros! Sin duda, el mejor complemento para este verano es comprar una polera (o unos moldes para helados) y hacer nosotros mismos nuestras combinaciones favoritas para combatir el calor. La gran ventaja de los polos hechos en casa es que sabes todos los ingredientes que llevan, por lo que puedes preparar aperitivos y meriendas muy saludables para los más pequeños.
Helados de frutas para niños
Para esta receta, necesitarás:
- Una polera
- Palitos planos de madera
- Melocotones maduros
- Yogur blanco
- Azúcar, miel o nuestro edulcorante preferido
Como ves, esta es una receta infantil estupenda para aprovechar las frutas. Si a tu peque le cuesta comerlas, aquí tienes una idea fantástica para incluirlas en su dieta de una forma muy apetecible. Nadie dice que no a un helado, ¡menos todavía en verano!
Paso 1. Pela los melocotones y córtalos en trozos pequeños. Pon todos ellos en la licuadora para triturarlos bien. Cuanto más madura esté la fruta que uses, más sabroso saldrá el helado.
Paso 2. No obstante, si ves que necesitas endulzarla, puedes añadir un poco de azúcar, miel, sacarina, estevia o lo que normalmente emplees para estos casos.
Paso 3. Prepara las poleras. Puedes echar una cucharada de melocotón y otra de yogur para que el helado sea de varios colores. La distribución es cosa tuya.
Foto: La cuchara azul
Paso 4. El helado necesita reposar en el congelador al menos cuatro horas para que se solidifique. Ten un poco paciencia, ¡que el resultado va a merecer la pena! Seguro que mientras tanto puedes preparar otro aperitivo sano para niños.
Paso 5. ¡Ya está listo! Ahora solo tienes que desmoldar y disfrutar.
Esta receta de helados caseros es realmente sencilla. Pueden ayudar los pequeños chefs de la casa y se puede hacer prácticamente con cualquier fruta. Es cuestión de gustos.
Fuente: La cuchara azul
