Foto: Tarta Chic
En las Comuniones también se sirven tartas y unas muy ricas, además. Hoy os venimos a compartir una idea preciosa para decorar vuestra tarta de Primera Comunión para niñas, aunque es fácil buscarle el equivalente para niño invirtiendo el color y la figurita. ¿Os gustan las tartas infantiles? Yo creo que son las mejores porque tienen ese punto tierno con dibujitos y colores pasteles que las hacen ser intrínsecamente adorables.
Tarta de Comunión para Niñas
Foto: Tarta Chic
Realmente no me gustan mucho las etiquetas de «chico» o «chica» para las cosas, pero reconozco que en algunos casos son útiles para ordenar y descartar. Ese es el único motivo por el que las empleo. En este caso resulta evidente: la protagonista de la fiesta es una niña y tiene su tarta personalizada porque le han hecho un muñequito de ella misma, así que no hay más misterio. Esta tarta de Primera Comunión es de dos pisos y se ha recubierto de manera perfecta y muy limpia con fondant: en la parte de abajo se ha elegido el blanco y en la parte de arriba el rosa; de esta manera, se resalta más. Igual que la decoración: por un lado, tenemos un lazo muy elaborado y, por otro, un estampado de flores que es absolutamente divino, muy en consonancia con las fechas.
Foto: Tarta Chic
Como veis, el lazo tiene su propia textura, lo cual es una auténtica pasada porque creo que requiere mucho trabajo (y mucha paciencia) hacer esos relieves como si fuera una cinta de encaje o algo así. Pero todo hay que decirlo: el resultado es impresionante y cuando alguien se toma tantas molestias en algo solo puede significar cosas buenas, ¿verdad? Y es que las tartas de comunión se hacen con mucho mimo porque están destinadas a un día maravilloso.
Por cierto, como curiosidad… ¿cuánto diríais que pesa la tarta? ¡Cuatro kilos! En serio.
Fuente: Tarta Chic
