Tarjetas, fotos, adornos de papel y pensamiento positivo para un árbol de Navidad personal…
Hay mucho de verdad en que verbalizar los buenos deseos ayuda a conseguirlos. Pues bien, aquí tienes una forma gráfica de llevar a la práctica ese pensamiento positivo. La propuesta es trabajar en este sutil árbol de Navidad para pegar en la pared buenos deseos…
Podría decirte que lo hagas en plan familiar, y que cada uno aporte su foto, pero no sería consecuente con lo que pienso… Creo que este árbol es muy personal y que cada uno debe construir el suyo propio (un poco como el destino, ¿no?).
¿Qué te parece sugerir a los pequeños de la familia que se hagan su árbol de los buenos deseos con todas aquellas tarjetas que representen gráficamente lo que realmente desean? Las fotos (quedan preciosas en blanco y negro y lo puedes hacer con un programa sencillo en tu ordenador) se pegan con cinta de pintor (¡ojo!, de poca adherencia, que algunas se llevan la pintura de la pared por delante…) y pueden acompañarse de un escrito tan sutil como el que ves en la foto.
«¡Disfruta las vacaciones! Celebra la tranquilidad, lee un libro, sal a conocer gente de verdad, haz el amor, ordena tus cosas, encuentra la paz.»
Me encanta la tipografía… Es la de las máquinas de escribir de toda la vida. No te pido que busques a estas alturas la antigua máquina de escribir familiar, pero cuida la presentación de la tarjeta utilizando una cuartilla de papel elegante. Rizarás el rizo si buscas en las tipografías de tu procesador de texto una que te guste y refleje tus pensamientos…
Bueno, al fin y al cabo este árbol de Navidad no lo hará todo el mundo. Pero estoy segura de que si lo has elegido y has llegado leyendo hasta aquí, para ti los detalles cuentan, y mucho… ¡Que tus deseos se cumplan en 2012!
¡Feliz Navidad!
Vía: Stil Inspiration
