Mallorca

Pase lo que pase, las Baleares siempre se presentan como una muy buena opción para pasar el verano. Después de un año en el que muchas personas apenas se han movido de su ciudad de residencia habitual, las reservas de vacaciones en Mallorca con Centraldevacaciones.com han aumentado considerablemente, ya que se pueden encontrar muy buenas ofertas para todos los gustos y para toda la familia.

Las Islas Baleares recibieron alrededor de 13,6 millones de turistas en 2019, una cifra que, aunque fuera inferior a la de 2018, no deja indiferente en cualquier caso.

Mucho de este turismo está encabezado por los extranjeros, especialmente ingleses y alemanes, pero cada vez son más los españoles que, lejos de pensar en otros lugares de Europa, aprecian el tesoro que encierra el archipiélago y lo marcan en rojo como lugar predilecto de vacaciones.

Entre las islas más cotizadas para las familias se encuentra Mallorca, fundamentalmente porque es la que, de alguna manera, cuenta con más servicios y con playas más accesibles.

Tanto Ibiza como Menorca o Formentera tienen más zonas vírgenes a las que acceder tras varias caminatas, lo cual no siempre es cómodo si se viaja con niños pequeños.

Mallorca

Así que, si aún estás pensando en el plan para este verano, no dudes en contemplar la posibilidad de ir a Mallorca, echar un vistazo en centraldevacaciones.com y reservar a buenos precios para que podáis pasar unos días inolvidables en un marco inmejorable.

Para terminar de despertar al gusanillo, a continuación vamos a identificar algunas de las mejores propuestas de lugares y actividades que se pueden visitar o hacer en familia en la isla:

Dónde quedarse. Entre los lugares quizá más cómodos para alojarse se suele destacar la zona de Alcudia o Pollensa. Ambos cuentan con distintos alojamientos pensados para todo la familia en un ambiente desenfadado, cercano y muy agradable. Cualquiera de las dos elecciones será acertada.

Además, la isla no es muy grande, con lo que desde cualquiera de las ubicaciones se podrá acceder fácilmente a todos los lugares de interés turístico. Eso sí, se recomienda alquilar un coche para no depender de transporte público y poder ser más independiente.

Cuevas del Drach. No es de extrañar que sea la primera y más importante actividad que se recomienda hacer en familia. De Alcudia o Pollensa se encuentra a una hora escasa. Este lugar es casi un milagro de la naturaleza. La visita está muy bien organizada y enfocada a todas las edades, por lo que los niños suelen disfrutarla bastante, además de por la cueva en sí, también por el espectáculo que ofrecen.

Playas de Mallorca

Eso sí, conviene hacer las reservas con tiempo ya que con la compra online muchas veces se completa el aforo rápidamente.

Sóller. Este pueblecito con encanto es un lugar idílico donde parece que se ha parado el tiempo. Lo que suele gustar más a los más pequeños es ver su histórico tren que rememora cómo eran antes.

Alquiler de bicicletas. Mallorca tiene mucho carril bici y, además, los paisajes son tan bonitos que merece la pena hacerse una ruta cortita en familia y disfrutar del entorno a la vez que se hace algo de ejercicio.

Artestruz. A un poquito más de una hora, se encuentra este parque donde se pueden ver cómo se cuidan estas grandes aves. Esta granja ofrece visitas guiadas para que toda la familia pueda conocer más acerca del avestruz, desde que es pequeño hasta que llega a edad adulta.

Además, si hay suerte, os podéis llevar a casa también un huevo de avestruz para cocinarlo siguiendo las indicaciones que allí os darán.

Fábrica de vidrio. Otra actividad que dejará a los niños con la boca abierta es la visita a algunas de las fábricas de vidrio que ofrecen pequeños tours guiados. En ellas se podrá ver cómo todavía se estila el soplar el vidrio para construir distintas formas de objetos. Resulta algo totalmente fuera de lo común y una experiencia educativa para los niños de la que, seguro, se acordarán toda la vida.

Excursiones en barco. Las aguas cristalinas de Mallorca son su punto más fuerte. Además de ir a la playa y sumergirse en esas aguas transparentes, son muchas las excursiones en barco que se pueden hacer y que gustan a toda la familia.

Las hay de todo el día o de sólo una mañana. Para quienes estén habituados a ir en barco es un plan para toda la jornada, pero si no se tiene tanta experiencia, quizá con medio día sea suficiente, para evitar mareos o que se haga muy pesado.

Bañarse en alta mar es una experiencia única. Además, no hay que preocuparse por nada, ya que los niños están obligados a llevar chaleco salvavidas y pueden bañarse con él si lo prefieren.

Palma de Mallorca. La visita a Palma de Mallorca también es obligada. Aunque esto pueda parecer un poco más rollo a los niños, la majestuosidad de la catedral frente al mar es posible que se les quede grabada en la retina para siempre.