Aprovechad las semana para poner en práctica estas actividades para que los niños se empapen del espíritu de Halloween desde el minuto cero! Son muy sencillas y como siempre, solemos tener todo el material a mano en casa, así que no hay que hacer gasto.
La primera manualidad que os proponemos consiste en pintar unas arañas tan expresivas como las de las fotos, de patas suaves hecha con limpiapipas…Te sobran unos cuantos vasos de un sólo uso, de papel o plástico? Sólo hay que pintarlas con una capa de pintura plástica, a elegir entre colores variados. Después, podemos pintarle los ojos o pegarles unos de plástico de “pupila móvil” y que les dan ese aire loco tan característico, y ya sólo faltaría hacerles unas pequeñas incisiones a los lados para encajar las patas, también con limpiapipas de colores.
¿Ya tenéis las cajitas para meter los dulces? El viejo recurso de las hueveras de cartón nunca pasa de moda (por algo será). Os pueden salir cosas tan minimalistas y saladas como estos personajes de Halloween improvisados y contrahechos. Recortamos las partes abultadas de las hueveras, las pintamos con un par de capas de pintura acrílica y cuando estén secas, se les insinúa la boca con unos cortecitos como en la fotografía y se remata con unos ojos y expresión según el dictado de la creatividad propia. Ah! Luego hay que rellenarlos de caramelos y asegurarlos con un bonito lazo!
Nidos de araña en tu salón con esta sencilla idea en la que sólo necesitareis lana blanca, un poco de cola mezclada con agua y un globo inflado no demasiado inflado (ligeramente superior al tamaño de un puño). Se trata de introducir un tira larga de lana blanca en una mezcla acuosa de cola de pegar y agua (de consistencia media -mejor ir probando la proporción-). Al sacarla, habrá que ir enrollándola de forma desordenada alrededor del globo y cuando esté seca, adornarla con una realistas arañas de mentira, porque va a ser difícil que las auténticas se estén quietas.
Sin duda estas momias no tienen 3000 años, porque se hacen en un santiamén y os ahorráis los ritos funerarios tan latosos…Sólo se necesitan los cartones duros de las cajas que ya no necesitéis y vendas para forrarlos. Después de pegar las vendas en varios puntos con unas gotas de cola blanca, aseguraos de que lleven ojos, porque si no parecerán simples vendas usadas de hospital…Y no es precisamente el efecto que buscamos!
En una vuelta de tuerca más a la clásica calabaza, nos ha sorprendido esta mini-calabaza que mira con cientos de ojos locos. Una obra de arte express. A los niños les encantará porque sólo hay que añadir y añadir ojos a una zona delimitada de nuestras calabazas a la que previamente habremos dado una capa de cola -delimitada también a la zona de trabajo-. Parecerá que os está mirando desde todas direcciones…
Y finalmente, por qué no tematizar la fiesta en base a unos platos caracterizados de Frankenstein, vampiros, calabazas y un largo etcétera? Inspírate en las imágenes y con las tijeras da forma a las piezas que harán las veces de tornillos, ojos, dientes afilados en forma de triángulo o lo que se os ocurra…
A que no hay excusas para cruzarse de brazos este año?
Vía Apartment Therapy, Craftown; Thecentsiblelife, Modern Parents, Curly Birds, Blog a la cart y Simple as that blog