Un erizo para los más pequeños. Solo tienen que pegar las hojas en la parte del dibujo que corresponde a las púas y listo.
Mariquitas y gusanos hechos con hojas y pintados con bonitos colores. Quedan chulísimos.
Con la vuelta al cole llega inevitablemente el otoño, tiempo de fresquito, hojas caídas y tardes en casa que invitan a realizar manualidades con los niños. Es un buen momento para preparar manualidades con materiales naturales y las hojas que caen de los árboles son uno de los materiales más populares para realizar manualidades en casa. La paleta de colores es muy variada al igual que los tamaños de las hojas. Ideas llenas de creatividad. Hojas convertidas en animales del bosque, hojas que ocultan secretos, hojas para disfrazar a personajes… un mundo de imaginación y creatividad para los peques.
Esta vaca hecha solo con hojas de colores, aquí han recortado las hojas para dar forma a las patas y el cuerpo.
Imponente gallo
Una de las partes más divertidas es la de la recolección de hojas. Primero hay que ir al bosque o al parque a recoger hojas de todos los colores y formas. Es muy importante que recojáis hojas que ya han caído del árbol. Para completar las piezas de arte podéis coger alguna que otra ramita seca que seguro que la podéis utilizar para la composición.
Las aves son unos de los animales más utilizados para esta manualidad con hojas, sus plumas dan mucho de sí.
La imaginación y la creatividad se unen para formar verdaderas obras de arte ya sea haciendo una composición para hacer aparecer un bonito animal ya sea para realizar una composición abstracta llena de color otoñal. Y como seguro que quedarán preciosas las podéis colgar en la habitación, enmarcar en un cuadro o regalarla a los abuelos que seguro que les encantará.
¿Quien ha visto zorros en el bosque?
Si queréis ver más composiciones podéis ver el post que realizamos el pasado otoño de Hojas de otoño transformadas en arte.
Vía: Kidsomania