Foto: A Subtle Revelry
¿Os acordáis de aquella preciosa manualidad en la que la nariz de Rudolph se convertía en chupachups? Es una idea muy original de entregar un dulce tan normal como un chupachups. Con unas cartulinas y un poquito de nuestro tiempo lo convertimos en un detalle precioso. Ahora os traemos otra idea igual de genial: fundas bonitas para chupachups. ¿A quién no le gustan los conejitos?
Fundas de conejito para los chupachups
Foto: A Subtle Revelry
La idea es muy sencilla. Nos descargamos una plantilla que podemos encontrar en el blog de A Subtle Revelry que tan amablemente nos ceden a los visitantes, imprimimos, recortamos, hacemos el agujero con el sacabocados y vestimos al chupachups. Podemos unir a los conejitos (o gatitos, realmente me parecen más felinos que leporinos) con pegamento para que se quede perfecto. ¿Qué otros animales se te ocurren? Como ves, el diseño es sencillo y seguro que puedes hacer tus propias creaciones: zorritos, perros, sapos, ¡incluso una foto de tu hijo! Tienes un montón de opciones divertidas y todo lo que necesitas es sentarte delante del ordenador unos minutos para hacer tu diseño siguiendo la idea que nos comparten en el blog.
Foto: A Subtle Revelry
Esta delicada manualidad es perfecta para preparar detallitos para los cumpleaños de los peques, fiestas infantiles y, en general, cualquier celebración. Pega mucho en fiestas temáticas de animales, ¿verdad? Pero en todas las ocasiones este presente va a caer bien porque es sencillo y alegra los corazones. También cabe destacar el detallito del «cuello», que es como una bufanda. Esto se puede hacer con algún papelito de craft o con cinta washi, ¿a que queda muy simpático? Rizando el rizo, podemos añadir una etiqueta con los nombres de los peques invitados a una fiesta… ¡Hay mil ideas dispuestas a que las explotes por ahí!
Fuente: A Subtle Revelry
