Divertidos regalos para una fiesta pirata

Estos sacos son tan bonitos y divertidos que dan ganas de descubrir qué esconden dentro…

Si te pusieras a imaginar los detalles perfectos para una fiesta pirata, y luego vieras estos, pensarías: ¡Claro, esto es justo lo que estaba buscando! Y es que Terrón de Azúcar sabe poner siempre en los detalles que crea y realiza una sabia combinación de perfección, creatividad y humor. Quizá es porque Rebeca Terrón es tal y como demuestra cada día en su blog: divertida, sabia y muy imaginativa…

Nos cuenta Rebeca que en este caso se trataba de una fiesta de Primera Comunión que se celebraba en Asturias. Y que el encargo que hicieron a Terrón de Azúcar eran los regalos para los invitados.

A cada niño se le dio un ‘alias pirata’; las siluetas de los bucaneros son todas diferentes y monísimas…

Como la arpillera tiene tantos usos, eligieron este tipo de tela de saco para crear una bolsitas donde guardar bolsas de chuches (cerebros y dedos cortados de gominola y demas ‘casquería’) y un detalle para los pequeños invitados  (un sello pirata para que cada peque pudiera estampar su marca bucanera…).

Lo mejor es la etiqueta personalizada que tiene cada saquito: un dibujo pirata y el nombre de cada niño acompañado de su ‘mote’: Manuel, el pirata cruel; Pelayo, Barba Roja; Mateo, Cara Cortada…

Golosinas que parecen cerebros, dedos cortados, dentaduras… Puag… ¡les encantarán!

Estos regalos de piratas tan imaginativos seguro que acompañaron a una pequeña fiesta temática a la medida. Si te interesa preparar una, puedes encargar los detalles a Terrón de Azúcar o (pssshhh, entre nosotras, copiar un poco la idea) y tener en cuenta que este tipo de fiesta debe tener siempre su punto de humor, y ser un poco transgresora (o un pelín ‘canalla’ como prefieras)… O sea, trasladado al mundo de los niños, parche en el ojo, cicatriz en la cara, badana en la cabeza, espada en la mano igual a «No me pienso estar sentado en la mesa merendando»… Como decimos en casa, ¿lo pillas…?

¡Gracias por las ideas, Rebeca!

Vía: Terrón de Azúcar