Foto: Mer Mag
Si hay una cosa que tengo clara, solo una, es que la creatividad es infinita. A lo largo de todas las manualidades que hemos ido recopilando por aquí, haciendo en casa, viendo en esos vídeos rápidos que se comparten en la redes sociales y un largo etcétera, he aprendido que siempre hay espacio para la sorpresa. Y eso es genial. El ingenio no se agota, así que tenemos que aprovecharlo bien para hacer DIY interesantes. Hoy vamos a reciclar unos tarros y decorarlos con cinta aislante. Prometedor, ¿verdad?
Manualidades para niños: tarros decorados
Los materiales que necesitamos podemos encontrarlos fácilmente, ya que vamos a usar cosas que tenemos por casa seguro:
- Pegamento
- Pintura
- Cinta adhesiva / cinta aislante (puede ser de colores)
- Papeles de colores
- Rotuladores
- Pegamento
- Otros artículos de manualidades (lentejuelas, pururina, botones…)
- Tarros vacíos preparados para ser decorados
Foto: Mer Mag
El uso que les des después a estos tarros ya es cosa tuya, pero la verdad es que tienen una gran versatilidad y en un cuarto infantil pueden quedar fantásticos. Por ejemplo:
Idea 1. «El elefante». Con esta manualidad reciclada, haremos un elefante usando el tarro y dos orejas de cartón que pegaremos a los lados. Después podemos reconvertirlo en un divertido macetero con una planta resistente, que sea sencilla de cuidar para nuestros peques, y dejarla en su dormitorio. Puede ir sobre el escritorio, cerca de la ventana o donde más les guste. Tener una plantita puede enseñarles a ser más responsables y consciente de lo que necesitan los seres vivos.
Idea 2. «El portalápices». Esto necesita poca explicación, pero básicamente se trata de alegrar el exterior del tarro con unas vueltas de cinta adhesiva, sin mucho misterio, y agregar unos lunares muy simpáticos para darle dinamismo. Y con eso tienes un sitio estupendo para guardar los lápices de colores de tus futuras creaciones y mantener el orden en el cuarto.
Fuente: Mer Mag