Bienvenidos a la ciudad de Fondo de Bikini!
Del otro lado del charco nos llega una fiesta infantil de cumpleaños decorada e inspirada por el inigualable Bob Esponja, con unos colores muy cítricos y playeros para hacer las delicias de los niños. Están representados los personajes más característicos de los dibujos animados -especialmente la estrella de mar, Patricio- y sobretodo el ambiente que espanta al aburrimiento.
Siempre es un bonito detalle poner algo de tu propia cosecha (por ejemplo, una idea. No tiene que ser siempre algo comestible) y personalizar una fiesta. Detrás de esta decoración está una madre que le quiso dar una pequeña vuelta a la temática y añadió piñas aquí y allá, además de brillantina dorada, que siempre añade más importancia al asunto (sospecho que al llamarse la niña del cumpleaños “Goldie” -diminutivo derivado de la palabra “oro” en inglés- algo tuvo que ver también en el asunto). Además, enviar una invitación personalizada al evento siempre es un plus. No hay que olvidar que es un recordatorio a conservar que traerá seguro buenos recuerdos en el futuro.
Los pompones de nido de abeja (redondos, tipo farolillo chino y de piñas) son una apuesta segura siempre. Basta con que sigan el esquema de color para que cuadren a la perfección. Y de nuevo, siempre puedes personalizarlos a tu gusto añadiendo, como es el caso, unas tiras coloridas que aportan movimiento y contraste.
Y bueno, ya sabéis que hay que jugar con todos los elementos de la serie y no llamar al agua simplemente “agua”, sino agua de Fondo de Bikini, que sabe mejor y es más sugerente de esta forma. Y es absolutamente imprescindible llenarlo todo con la sonrisa tontorrona de Bob, en el menaje, los dulces y una piñata gigante en la que cabe una tonelada de dulces.
Larga vida a Bob Esponja!