Foto: BuzzFeed
Sé que suena a una idea loca, pero, ¿no te apetece probarla? ¡Gelatina dentro de una sandía! No te preguntes dónde se cultiva porque esto es un trabajo para hacerlo en casa y te explicamos paso a paso cómo vaciar una sandía y aprovechar su cáscara para hacer unos cuencos magníficos y comestibles. Son ideales para hacer un cumpleaños infantil, una fiesta con niños o incluso un babyshower.
Encima de rica, fácil y divertida. ¿Te animas a prepararla con los peques? Esta es una manualidad de cocina, así que hay que ponerse el delantal y… ¡adelante!
Cómo hacer este delicioso postre de gelatina para el verano
En primer lugar, necesitaremos:
- Una sandía
- Gelatina (puede ser de otro sabor diferente a la sandía, pero la gracia está en que coincida)
- Un cuchillo
- Una cuchara
- Agua
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Con nuestros materiales principales ya preparados, procedemos a hacer esta delicioso postre. Lo primero, tenemos que proceder a vaciar la sandía. Para hacerlo, primero hay que cortarla en dos trozos lo más simétricos posibles. Un cuchillo afilado y un poquito de fuerza serán nuestros aliados para esta operación. Ahora toma una de las mitades y, antes de vaciarla, ayúdate del cuchillo para recortar los bordes. Luego, con una cuchara, vas sacando la carne de la sandía. Obviamente no la vas a desperdiciar. Puedes hacer una tarta de sandia como te explicamos en el enlace, unos helados o cualquier otra cosa.
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Lo siguiente que debemos hacer es preparar dos bandejas con papel de cocina para que sostengan las mitades de las sandías, ya que, como se vuelquen, perderemos todo el avance y nos quedaremos sin nuestro delicioso postre veraniego. ¡Mucho cuidado con esto!
Ahora encárgate de la gelatina según las instrucciones del fabricante: más o menos, en este caso se ha usado entre 3 y 4 sobres de gelatina con sabor y entre 2 y 1 sobre de gelatina neutra. Aquí también se ha añadido algo de vodka, pero como nosotros pensamos en los peques mejor descartamos ese toquecito y todo el mundo podrá disfrutar del resultado sin restricciones… También puedes probar a hacer una mitad con para los mayores y otra sin. O, ya que estamos, podrías aprovechar y hacer una mitad de un color y otra mitad de otro, ¿qué te parece?
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Siguiendo las recomendaciones de tu paquete de gelatina, tendrás que dejarla reposar en el frigorífico. El resultado final debería parecerse a este… ¿No es fantástico? Ahora solo tienes que coger el cuchillo que te ha acompañado durante toda la experiencia culinaria y preparar unas buenas tajadas de gelatina. Como sugerencia de presentación, los trozos que se ofrecen son pequeñitos. La verdad es que queda muy apetecible y da la sensación de que el ambiente ya huele a gelatina, ¿verdad? Estas foros le abren el apetito a cualquiera.
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Ya sabemos que la idea es genial y seguro que le sacaréis partido con otras frutas (también se puede hacer con naranjas, melones…). La presentación es muy simpática y ahora que estamos en verano, estos postres fresquitos desaparecen en cuestión de segundos. ¡Buen provecho!
Fuente: BuzzFeed
