Foto: The View From Great Island
¡Qué calor! Repetimos una y otra vez durante el verano mientras nos abanicamos… que, por cierto, hacer abanicos de papel puede ser muy divertido con los peques, pero es más importante recordar que debemos mantenernos bien hidratados y beber agua incluso cuando no tengamos sed porque con el sudor perdemos muchos líquidos. Una buena idea es comer fruta… ¡y encima hacer helados caseros para niños!
Helados caseros de frutas con kiwi, fresas, arándanos
En la primera foto vemos un helado fantástico, muy apetecible, hecho únicamente de frutas. ¡Qué rico! El punto fuerte es que este helado no engorda nada y refresca mucho; encima es una forma muy divertida de comer fruta. Elige tus favoritas, tritúralas y ve llenando la polera de a poco. Primero una capa, dejamos que endurezca y añadimos la siguiente. Es verdad que es un pelín pesado de hacer, pero el resultado es tan genial que se puede servir en fiestas infantiles y en fiestas de cumpleaños. Recuerda pasarlo por la trituradora y disfruta.
Helados caseros de kiwi y fresa
Foto: Real Food by Dad
Otra de las combinaciones ganadoras es mezclar rodajas de kiwi con puré de fresas. No hay peque que se resista a estas dos frutas juntas. Además, como puedes ver, da unos helados precisos, muy coloridos, a los que dan ganas de hincarle el diente nada más verlos.
Helados de fruta y leche para niños
Foto: Desserts for breakfast
El kiwi es la fruta estrella para hacer polos de verano en casa, no cabe la menor duda, pero es que tiene un sabor muy particular que hace de él una elección estupenda para comer en cualquier momento. A este helado casero le hemos añadido naranja y nata, aunque podemos modificar los ingredientes a nuestro gusto.
¡Qué fresquitos y qué sanos podemos pasar el verano!
Fuente: ¡pincha bajo las imágenes!