Aloha! Nos ha encantado esta fiesta al aire libre Hawai de una de nuestras lectoras para dar la bienvenida al verano, pero le ha quedado tan espectacular que habría que hacer por lo menos otra de despedida -llegado el momento-. Para invitar a niños, grandes y medianos y pasar un rato de diversión tropical todos juntos, claro que sí!
La artífice ha sido la mano maestra que se esconde detrás de El taller de los dulces. Ha sabido captar el espíritu de Honolulú en una combinación magistral de colores que contagian la alegría y el espíritu vacacional: sentarse a la sombra, bajar a la playa, tomarse un refresco bien fresquito y disfrutar con la familia y los amigos. Un enorme rosetón de colorines animaba la mesa de dulces, bien acompañado de las típicas flores tropicales de los collares de bienvenida a las islas.
No os encanta cómo han customizado unas sencillas botellas de agua? Es el síndrome de la falda hawaiana, ese complemento ideal que queda genial en cualquier parte y dispara el subconsciente con imágenes de relax en playas cristalinas. También hemos tomado buena nota de la arena de playa comestible conseguida a base de machacar galletas…Mmm. Dulce a la vista y al paladar. Otro detalle simpático que nos ha encantado son los cupcakes tirándose a la piscina por un tobogán! Destacan sobre una mesa repleta de golosinas…y para bajarlas, los invitados podían acercarse al tiki-bar y tomar su bebidas en cocos, como no!! Limonadas, granizados, y cócteles sin alcohol para todos los gustos.
Siendo El taller de los dulces el responsable de la fiesta, no podían faltar las galletas decoradas con forma de bailarinas hawaianas, que no sabían que aquella tarde harían su último baile de camino a la boca de los invitados, que por si fuera poco también podían llevarse a casa un paquetito con más dulces.
A que hace el verano más llevadero? Sobretodo si la fiesta la han preparado entre toda la familia, como nos consta que es el caso. Así debería ser siempre, al gusto de todos!
+ Info El taller de los dulces
