¡Qué caras más divertidas! Y la decoración es un juego de niños…

Estas tartas de cumpleaños son una gran idea y pueden servirte de inspiración para empezar a hacer tus propias creaciones de repostería. Las dos más sencillas son las tartas con caritas (de niño y de conejito con zanahoria), y sirven de ‘plantilla’ de iniciación para la decoración de tartas. A partir de ahí puedes empezar a hacer creaciones cada vez más complejas. Estos modelos los hemos visto en Ohdeedoh.

Este conejito… no sabrás si comerlo o hacerle una foto.

Resultan tan sencillas de decorar que dan ganas de ponerse manos a la obra inmediatamente.

Te propongo hacer una tarta sencilla comprando la base de bizcocho, mojándola con un almíbar y rellenando de nata y mermelada de fresa. Para decorar sólo tienes que preparar un glaseado duro y verterlo por encima y, luego con una manga pastelera de boquilla fina dibujar los detalles.

Receta de glaseado tipo merengue

Batir 2 claras de huevo a punto de nieve junto con dos cucharaditas de zumo de limón. Añadir 330 gramos de azúcar glass poco a poco y mezclar bien. Luego ya se pueden añadir las gotas de colorante.

¡Y a decorar se ha dicho!