ewok de la saga Star Wars
Érase una vez una mamá que cada año cosía divertidos disfraces caserosde Halloween para su hijo: un año de Gus, el ratoncito de Cenicienta; otro de Lobo Max; en la siguiente ocasión de Ewok de El Retorno del Jedi… No es un cuento, no. La mamá existe, y escribe en el blog Running With Scissors (algo así como Avanzando con la tijera).

Jessica, que así se llama, cuenta que le encanta hacer manualidades (lo heredó de su madre), y que cuando se embarca en algún proyecto, como además es madre y esposa, aprovecha muchas noches quedándose hasta bien tarde para terminarlo. Fue una imposición que se hizo a sí misma al observar que si ella estaba a sus cosas, su hijo podía pasar horas viendo la tele…

Pues bien, no quería comprar un traje en serie, sino diseñar algo original y único, aunque no demasiado difícil. El primer año improvisó un disfraz de ratoncito Gus para su niño, que entonces tenías seis meses. Y lo hizo con una camiseta algo pequeña, un gorro y unas orejeras a las que acoplar las grandes orejas. ¡Qué mono rodeado de calabazas de Cenicienta…! El segundo año, cuando ya tenía 18 meses, decidió basarse en un cuento (y en un pijama de cuerpo entero) para hacer al Lobo Max.

El último Halloween eligió un disfraz casero de Ewok, los míticos seres del bosque de La Guerra de las Galaxias, visto que de Willow (de El Señor de los Anillos) no lo reconocería nadie… Se las ingenió con un viejo pijama al que añadió una capucha con dos orejas, y una tripita de color claro. Luego cortó sin demasiado cuidado una caperuza con dos aberturas (para las orejas, claro).

Gus, raton de cenicienta

No te pierdas este blog con geniales ideas para la ropa de los niños. ¡Felicidades, Jessica! Los disfraces, impresionantes, y el niño, precioso…

Vía: Running with Scissors